Las lamentables condiciones laborales y salariales que se estilan en el fotoperiodismo son de sobra conocidas. Pero que es una profesión que ademas implica muchos riesgos tal vez no tanto. «Hasta ahora, el colectivo de fotoperiodistas no había sido tenido en cuenta en políticas de prevención de riesgos laborales, y lamentablemente, las dolencias derivadas de su oficio no son reconocidas», explican desde el Sindicat de Periodistes de Catalunya, que acaba de presentar el primer Manual de riesgos del fotoperiodismo.
Un completo estudio elaborado por Pau Prats que analiza al detalle todos los riesgos asociados a este trabajo. Desde los más evidentes, como cargar durante muchas horas con el equipo o subirse a cualquier sitio para conseguir la foto, a las agresiones policiales o los problemas de estrés por la carga de trabajo y las crecientes trabas para acceder a los lugares donde ocurre la noticia a fotografiar.
«Al ser una profesión vocacional y apasionante, los fotoperiodistas a menudo aceptan los inconvenientes y riesgos inherentes a ella, lo que puede llevar a una sobreimplicación y minimización de los problemas asociados», leemos en el manual. Algo que algunos estudios ya habían señalado para intentar explicar por qué, en general, la fotografía es una profesión tan mal pagada.
Además de detallar los diferentes riesgos a los que los profesionales se enfrentan en el día a día y valorar su magnitud y consecuencias, también tiene una vertiente práctica. «Este manual es una herramienta de apoyo que ya se puede utilizar para impulsar el reconocimiento de dolencias laborales e incluir medidas de mejora en los convenios colectivos», apuntan desde el sindicato.
El «Manual de riesgos del fotoperiodismo» es sólo la primera parte de una campaña iniciada por el Sindicat de Periodistes de Catalunya en todo el país que pretende recopilar más datos sobre la profesión dirigidos a conseguir «el reconocimiento oficial de las condiciones laborales de este colectivo, incluyendo la adaptación de la edad de jubilación de acuerdo con la exigencia física de la profesión».
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