Sigma tenía un tanto abandonada su gama APS-C, al menos si lo comparamos con las novedades para formato completo. Pero parece que el acuerdo con Canon ha sido la excusa para relanzar este catálogo con ópticas tan interesantes como el nuevo zoom Sigma 17-40 mm f1.8 DC Art.
Un objetivo único por cobertura y luminosidad que toma el relevo, trece años después, del 18-35 mm f1.8 para cámaras réflex. Ahora este zoom, el de mayor luminosidad del memento, se presenta en versión para cámaras sin espejo con sensor APS-C y montura Canon RF, Sony E, Fujifilm X y sistema L. De las Nikon Z, por ahora, no hay noticias.

Así que, en cierto modo, este 17-40 mm no necesita presentarse porque quienes conocieron el 18-35 mm original ya sabrán de sobra cuál es la idea: un zoom de gama alta, pensado para los usuarios más exigentes y las cámaras APS-C más potentes que sacrifica algo de cobertura a cambio de ese f1.8 que lo hace único.

No es pequeño, pero esos 500 y poco gramos y sus dimensiones suponen un 30% menos que las del modelo original para cámaras SLR. El diseño es el habitual en los últimos objetivos de Sigma, con buenos acabados, anillo de diafragmas y varios botones configurables.
Un par de buenas noticias sobre la construcción: el objetivo es sellado y el zoom es interno, con lo que sus dimensiones se mantienen en todo momento. La rosca frontal de 67 milímétros tambien evidencia que el tamaño es bastante controlado.
En el vídeo podéis verlo en acción y os contamos todos los detalles, pero como siempre resumimos por aquí también algunos de sus puntos más interesantes y aprovechamos para compartir fotografías de muestra a máxima resolución, tomadas todas con este Sigma 17-40 mm f1.8 montado en una Sony A6700.
En las pruebas realizadas se puede apreciar que la calidad de imagen es realmente alta y vamos a poder trabajar a máxima apertura sin problemas. Al final de eso se trata en las ópticas más luminosas que conllevan un precio más alto y tambien más peso a cambio de ese punto y poco más de apertura.
En el centro de la imagen a f1.8 el rendimiento ya es excelente, con apenas diferencias si cerramos uno o dos pasos. En las esquinas sí que se aprecia algo de mejora al trabajar a f2.8 pero las imágenes a f1.8 son perfectamente utilizables.
A 17 milímétros se aprecia algo de distorsión y al combinar la distancia mínima de enfoque con la máxima apertura sí que hemos encontrado alguna aberración cromática en las imágenes. Quienes busquen un bokeh redondeado y perfecto también tendrán que diafragmar un poco porque sólo a partir de f2 encontrarán ese resultado.
El enfoque es muy competente y, puestos a ponerle pegas a este objetivo, la ausencia de estabilizador y el angular un poco corto (26 mm en Sony y Fuji y más de 27 mm en Canon) serían los puntos más flojos, aunque se entiende perfectamente que es una cuestión de equilibrio entre prestaciones, tamaño y peso.

Y es que los 1000 euros que cuesta este nuevo Sigma 17-40 mm f1.8 nos parecen más que razonables. Entre otras cosas porque, sencillamente, no tiene competencia. En ninguno de los sistemas para los que está disponible hay otro zoom con apertura constante de f1.8, así que para quienes este detalle sea crucial (velocidad, interiores…) este zoom es la única opción.
Un objetivo muy interesante para la gama alta APS-C. La citada A6700, las Fujifilm X-T5 y H2, las Canon R7 y R10… En el caso de Canon resulta especialmente interesante ante la ausencia de ópticas propias de cierto nivel para sus cámaras sin espejo. Y, quienes puedan vivir sin esa apertura de f1.8, Sigma también tiene un 18-50 mm f2.8 pequeño y más asequible para cámaras APS-C que puede ser una opción a tener en cuenta.


















Me ha gustado que tenga anillo de apertura.
Muy Fuji y también muy SONY.